La Guerra de las Galerías: La Historia de la Asociación de Museos de Arte Moderno (AMAM)

De la Amistad a la Enemistad

En 2015, la Asociación de Museos de Arte Moderno (AMAM) era una institución respetada y estimada en el mundo del arte. Con más de 50 años de historia, la AMAM se había convertido en un referente para la promoción y protección del arte moderno y contemporáneo. Sin embargo, en los años siguientes, la situación cambió radicalmente.

La Fractura

En 2018, la AMAM sufrió una grave fractura cuando su presidenta, la artista y curator, Sarah Johnson, decidió llevar a cabo una serie de cambios drásticos en la institución. La elección de nuevos miembros para el consejo de administración y la reorganización del equipo de dirección fueron vistas como un desafío a la autoridad de la presidenta. La comunidad artística se dividió en dos bandos: aquellos que apoyaban la presidenta y aquellos que se opusieron a los cambios.

La Guerra de las Galerías

La disputa interna pronto se extendió al exterior, con ambos bandos publicando artículos y declaraciones en los medios de comunicación. La situación se volvió tan acalorada que los partidarios de la presidenta comenzaron a recibir amenazas y recibir insultos en redes sociales. La policía tuvo que intervenir en varias ocasiones para restaurar el orden en las protestas y manifestaciones.

La Lucha por el Poder

La lucha por el poder dentro de la AMAM se convirtió en un asunto público. La presidenta, Sarah Johnson, se autoproclamó «la Donald Trump del mundo del arte pegajoso», mientras que sus oponentes la acusaron de ser una «dictadora» que se oponía a cualquier crítica o oposición. La situación se tornó tan tórrida que incluso los propios miembros de la AMAM comenzaron a dudar de la viabilidad de la institución.

La Conclusión

La Guerra de las Galerías ha demostrado que, incluso en el mundo del arte, la ambición y la disputa por el poder pueden llevar a la destrucción y la ruina. La AMAM, que fue fundada para promover y proteger el arte, hoy se enfrenta a una crisis existencial. Es hora de que los miembros de la comunidad artística reflexionen sobre la importancia de la colaboración y el diálogo, y busquen formas de superar las disputas y restaurar la estabilidad y la paz en el mundo del arte.